Hace muchos, muchos meses, se me encomendó la tarea de seguir respirando… por alguien, por mí. No solo eso, de sonreír, gritar o abrir los ojos.
Por el microespacio que se crea contadas veces, por el universo por crear… Hoy es un buen día para hacer justicia a ese juramento.
Es un sacrificio y un placer, verdadero, poder presentar EL TEATRO DEL ABSURDO.
Porque el sufrimiento forma parte de la media Luna y porque, solo a veces, y en contados momentos puedes ver esa mueca graciosa que hacen las sombras que te rodean al contraste de la luz esos días de verano… cuando el pensar, el pesar y el cansancio se apelmazan contra tu piel, aplastando todos tus sueños…
El Teatro del Absurdo, no deja de ser un teatro que te brinda sueños que se acaban, pero es una butaca donde soñar mientras miras en un palco… el Ocaso.
BIENVENIDOS AL TEATRO DE LO ABSURDO
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